CONCURSO MONOGRÁFICO DE MASTÍN ESPAÑOL- Torrelavega 2011
Texto y fotos: Ángel Fernández
Después de un periodo muy complicado, la Sociedad Canina Montañesa está intentando solucionar todos sus problemas y recuperar el pasado esplendor con una política muy restrictiva en el capítulo de gastos y con mucho trabajo por parte de la nueva Junta Directiva. Una muestra de este esfuerzo fue la realización de cuatro concursos monográficos el sábado día 3 diciembre, como introducción a la XXX Exposición Nacional Canina del día siguiente.
El emplazamiento elegido fue el Mercado Nacional de Ganados de Torrelavega, profusamento engalanado para la ocasión. La hora –como en los toros- las cinco de la tarde, con lo que, a poco de empezar, la única iluminación disponible era ya artificial. En sí mismo esto no fue un inconveniente, porque la visibilidad en los rings era perfecta, pero el fondo oscuro y el eco en estos enormes espacios cubiertos parece agrandarlos aún más y producen una sensación extraña, como si las personas y los perros fueran insectos atrapados en una mancha de luz. Desgraciadamente no siempre se dispone de un césped esplendoroso y un sol primaveral.
D. Francisco Ranea inició a las cuatro y media de la tarde la Confirmación de un grupo muy numeroso de mastines y pasadas las cinco se iniciaron los juicios del Mastín Español, a cargo de Dª Fátima Gómez Montes. Elaboró rapports de todos los concursantes y mantuvo un buen ritmo, sin dudas apreciables y recurriendo solo en momentos puntuales de la fase de movimiento a las comparativas de duos o tríos de ejemplares de la clase Abierta.
El mejor cachorro macho fue Benito de Andecé de Nava y el mejor cachorro absoluto fue la hembra Freda de Vega del Río Miera. Entre los jóvenes machos el Excelente 1º fue para Orestes de Ablanera y ganó la clase Jóvenes la hembra Bruma de Filandón. En la clase Intermedia venció Tango de Andecé de Nava. El ganador de la clase Abierta Machos fue Betunero de Montes del Pardo y el BIS -mejor ejemplar del concurso- recayó en la ganadora de la clase Abierta Hembras Torquemada de Fuentemimbre.
Para las siete de la tarde los juicios estaban concluídos y los asistentes se acercaron a las mesas donde la Organización había preparado un surtido de canapés y tortillas. Al no tratarse de un concurso puntuable para ningún campeonato, el ambiente fue mucho más alegre y relajado que de costumbre, más una reunión de amigos bien avenidos que la tensa sobremesa de una competición.
Muchos aficionados -sobre todo los que no están demasiado interesados en los concursos- abogan por este tipo de concentraciones, en las que se ven muchos perros y en las que el diálogo entre criadores es más fluido y fructífero. Todos estamos de acuerdo en que la crianza necesita la máxima colaboración de todos; ¿podría ser ésta una fórmula a tener en cuenta?
El emplazamiento elegido fue el Mercado Nacional de Ganados de Torrelavega, profusamento engalanado para la ocasión. La hora –como en los toros- las cinco de la tarde, con lo que, a poco de empezar, la única iluminación disponible era ya artificial. En sí mismo esto no fue un inconveniente, porque la visibilidad en los rings era perfecta, pero el fondo oscuro y el eco en estos enormes espacios cubiertos parece agrandarlos aún más y producen una sensación extraña, como si las personas y los perros fueran insectos atrapados en una mancha de luz. Desgraciadamente no siempre se dispone de un césped esplendoroso y un sol primaveral.
El mejor cachorro macho fue Benito de Andecé de Nava y el mejor cachorro absoluto fue la hembra Freda de Vega del Río Miera. Entre los jóvenes machos el Excelente 1º fue para Orestes de Ablanera y ganó la clase Jóvenes la hembra Bruma de Filandón. En la clase Intermedia venció Tango de Andecé de Nava. El ganador de la clase Abierta Machos fue Betunero de Montes del Pardo y el BIS -mejor ejemplar del concurso- recayó en la ganadora de la clase Abierta Hembras Torquemada de Fuentemimbre.
Muchos aficionados -sobre todo los que no están demasiado interesados en los concursos- abogan por este tipo de concentraciones, en las que se ven muchos perros y en las que el diálogo entre criadores es más fluido y fructífero. Todos estamos de acuerdo en que la crianza necesita la máxima colaboración de todos; ¿podría ser ésta una fórmula a tener en cuenta?